Democracia: Poner puertas al campo

Un día triste para la democracia a la luz de las noticias que han aparecido hoy. Por un lado, leo que el Gobierno chino ha decidido que cualquier noticia que se publique en Internet deberá pasar el control gubernamental, poniendo énfasis en los blogs. Un claro recorte de derechos fundamentales para una comunidad de 100 millones de internautas. Las nuevas reglas también van dirigidas a intensificar el control sobre Internet, lo que incluye forzar a los ‘bloggers’ y ‘chatters’ a utilizar sus nombres verdaderos. Una pena que en pleno siglo XXI todavía veamos reacciones tan arcaicas.

Por otro, según se publica hoy en La Vanguardia, Francia va a endurecer las medidas de seguridad tras los atentados de Londres. La nueva ley antiterrorista endurecerá las penas y regulará la videovigilanciade lugares públicos. Una de las medidas más llamativas es la que obligará a todos los cibercafés a conservar los datos técnicos de todas las conexiones de sus clientes, incluidos proveedores de acceso a internet, los números de teléfono entrantes y salientes, las direcciones conectadas y los enlaces con teléfonos móviles.

Desde luego, no es comparable al caso chino, pero igualmente supone una vulneración del derecho a la intimidad, y no veo un beneficio claro a corto plazo, por mucho que el objetivo último sea la prevención de atentados. Parecía imposible la visión futurista del Gran Hermano de George Orwell en “1984”, pero el hecho es que la tenemos delante de nosotros.