La magia de pensar en pequeño
Los números de las empresas de Internet abruman. Su filosofía de crecimiento la explica perfectamente Paul Graham, co-fundador de Y-Combinator: “Una startup es una empresa diseñada para crecer rápido. (…) Lo único esencial es el crecimiento. Todo lo demás que asociamos con las startups se deriva del crecimiento. (…) Para crecer rápidamente, tienes que hacer algo que puedas vender a un mercado grande.” El mantra desde que eres un embrión es que debes pensar en grande: no es malo disparar alto y fallar, sino disparar bajo y acertar. No es un mal consejo, siempre que seas consciente de las consecuencias de apuntar a las nubes. Porque trabajar hoy en grandes empresas de tecnología no difiere demasiado del implacable entorno competitivo de Wall Street en los ochenta. De nuevo la falacia de “los empleados son el activo más valioso de nuestra compañía”. El glamuroso mundo tecnológico se desvanece entre prácticas laborales dudosas, como las que ha publicado The New York Times sobre la cultura corporativa en Amazon. Empresas con jornadas de 16 horas, entornos fuertemente competitivos y muy absorbentes con las vidas de sus empleados. Empresas que asumen como algo normal que un empleado salga llorando de una reunión o consideran una baja por ansiedad como una “falta de rendimiento”. Empatía competitiva […]