Tagged: sociedad del conocimiento

Mentes creativas e innovadoras en España

0

Recuerdo mi asignatura de “Creatividad e Innovación” en la carrera, impartida por J. Félix Sáenz Lorenzo, un antiguo diputado que estuvo en la Comisión de Industria del Congreso, y que ahora es profesor de la Universidad de Zaragoza y director del Instituto de Biocomputación y Física de Sistemas Complejos. Entonces (1997) la situación española no era muy halagüeña, y ahora tampoco parece que vayamos mejor. La Comisión Europea dice que España carece de espíritu emprendedor y ocupa un lamentable puesto 22 (de los 25 países) en espíritu emprendedor y el puesto 14 en creación de conocimiento. Otras debilidades se localizan en la baja inversión en Tecnologías de la Información y de la Comunicación (TIC), un 17% inferior a la media de la UE. Sin embargo, la financiación universitaria de I+D por parte de empresas está por encima de la media comunitaria. Y lo peor de todo es que la tendencia es descendente, es decir, estamos perdiendo posiciones. Esto es comprometer nuestro desarrollo económico a largo plazo. Como dice David White, Comisario Europeo de Innovación: “El caso de España es interesante porque registra buenos resultados económicos, y lo ha hecho durante bastantes años. Esto sugiere que está absorbiendo todos los recursos disponibles, lo cual […]

(Leer más...)

Hacia las sociedades del conocimiento

0

Koichiro Matsuura, director general de la UNESCO, habla sobre sociedades del conocimiento: Hoy día sabemos que el desarrollo de sociedades en las que se aprovechen compartidamente los conocimientos es la vía que nos permitirá luchar eficazmente contra la pobreza, prevenir graves peligros para la salud como las pandemias, reducir las terribles pérdidas humanas ocasionadas por maremotos y huracanes, y promover un desarrollo humano y sostenible. En efecto, hoy tenemos a nuestro alcance nuevos estilos de desarrollo que no se basan como antaño en “el sudor, la sangre y las lágrimas”, sino en la inteligencia, la capacidad de la ciencia y la tecnología para resolver problemas, el valor añadido del intelecto y la expansión de los servicios en todos los sectores de la economía. Todo esto tendría que propiciar un desarrollo del espíritu cívico y el auge de una democracia prospectiva frente a la sociedad del riesgo. (…) Las naciones del mundo van a tener que invertir en la educación, la investigación, el fomento de la información y el desarrollo de “sociedades del aprendizaje”. De esas inversiones depende el destino de los países, porque aquellos que no inviertan suficientemente en el conocimiento y en una educación y ciencia de calidad pondrán […]

(Leer más...)