Monthly Archive: June 2012

Empleados ágiles vs. paquidermos corporativos

0

Las personas funcionan más rápido que los Departamento de Sistemas. Es una de las ventajas de ser pequeño frente a la inmensidad de las organizaciones. Vivimos rodeados de conceptos y siglas que no entendemos: acuerdos de nivel de servicio, procesos de servicio, ITIL, listas de acceso o implantaciones… De poco sirve invertir en redes sociales corporativas o nuevas herramientas colaborativas, si el usuario no percibe que puede usar una herramienta nueva con sencillez y eficacia y que le facilitarán su trabajo diario. Tan sencillo y eficaz como abrir un nuevo documento en un clic. Todo lo demás es sinónimo de demora y burocracia. Frente a la lenta maquinaria de Sistemas (paquidermo), nos volvemos ágiles y nos pertrechamos con “nuestras herramientas”, las que hemos aprendido a usar de forma autónoma: abrimos un proyecto en Basecamp o creamos un wiki, compartimos información a través de Dropbox, apuntamos y compartimos nuestras tareas en Evernote… La sencillez de la nube se ha convertido en nuestra compañera de viaje. A pesar del exceso de software colaborativo, buscamos y probamos alternativas. Por supuesto, el Departamento de Sistemas intentará llevarnos de nuevo al redil de las aplicaciones corporativas, pero para entonces quizá ya hayamos encontrado nuestro espacio. La adopción de tecnología […]

(Leer más...)

Obsesionados por ser y tener a los mejores

4

Recientemente, un comentario en un cliente me recordó esta frase de Funky Business, el libro de los suecos locos Kjell Nordström y Jonas Riddersträhle: Hoy en día, la sociedad de la sobreabundancia tiene un excedente de empresas similares, que tienen empleados similares, con formaciones similares, que tienen ideas similares, que producen cosas similares, de similar calidad y precios similares. La tendencia natural es pensar en que la solución pasa por ser los mejores, diferenciarnos de esa mediocridad a la que aboca la similitud. Como decía Jesper Kunde en “A unique moment”: “las empresas han definido tan bien cuál es el mejor modo de hacer las cosas, que ahora todas ellas son más o menos idénticas”. Es prioritario conseguir mejorar nuestra imagen de marca, diseñar los productos/servicios más innovadores (o más baratos), conseguir tener la mejor logística, ser quien dedicamos más tiempo a nuestros clientes, los más disciplinados con la ejecución de nuestras estrategias, los que aportamos mejores soluciones globales para entornos locales, los que diseñamos mejores sistemas y procesos, … Y todo esto aderezado con la obsesión constante por contratar a los mejores. Obsesionados por (ser y tener a) los mejores. No es suficiente con contratar a una persona con […]

(Leer más...)

Fracasar sí, pero mejor hacer bien las cosas a la primera

2

Ya nadie duda que vivimos tiempos de cambio, y tenemos que adaptarnos a estos tiempos convulsos y estar permanentemente en proceso de redefinición. Dentro de ese proceso, y condicionado por esa incertidumbre, se vuelven habituales las dinámicas de ensayo-error, con la posibilidad de fracasar una y mil veces antes de alcanzar tu objetivo. A menudo, nuestra cultura (que valora más conseguir resultados inmediatos que duraderos) aporta al fracaso una connotación negativa, mientras que otras sociedades más innovadoras lo consideran una etapa intermedia que nos acerca al éxito. Debemos ser capaces de analizar ese fracaso, aprender de él y compartir nuestra experiencia para evitar que otros y otras caigan en la misma trampa. Fracasar no es, por tanto, algo avergonzante. La calidad y superación de la persona no está en no fallar, sino en saber reponerse de sus errores y simplemente, seguir adelante. Esto que mi amigo Guzo López me enseño hace muchos años y que los psicólogos llaman resiliencia. Sin embargo, esa probabilidad de fracaso no debe ser una excusa ni un cheque en blanco. En mi experiencia, quienes marcan la diferencia son aquellos que son capaces de hacer las cosas bien a la primera. Son esas personas capaces de […]

(Leer más...)

Reflexiones #cw12: el futuro de internet lo hace la gente

2

Este fin de semana hemos asistido al Congreso Web 2012, dos días de charlas, talleres y ponencias sobre el presente y futuro de internet desde diferentes puntos de vista. En general, mi impresión general es bastante positiva. Comparto con ustedes algunas reflexiones al respecto: Ha habido ponencias de primer nivel. Buenos ejemplos son las charlas “Entendiendo la sociedad aumentada” de Dolors Reig o “Ciudadanos digitales: el futuro de Internet” de José Luis Orihuela. Me ha faltado cierto hilo argumental en el desarrollo de ponencias: varias de ellas trataban los mismos temas desde perspectivas similares. Además, en varios casos, la profundidad del contenidos era escaso, sin profundizar en la materia. Tematizar las ponencias y que la organización conozca con antelación los contenidos de las ponencias pueden ser soluciones a este área de mejora. Hay una progresiva profesionalización del sector, aunque todavía queda recorrido. Ver palabras como “eficiencia” en algunas ponencias hablan a las claras de ello. No he oido la palabra “monetizar” en todo el Congreso. Punto muy positivo. Es posible que no haya estado atento pero no he visto a nadie que se presentara como inversor en el evento (ya saben, encontrarte con gente conocida siempre te distrae y uno no […]

(Leer más...)

Comunicar sin ambigüedades

2

Dentro de mi función comercial, lidio diariamente con gente variada que tienen cargos de responsabilidad y suelo fijarme en cómo comunican sus ideas, si lo hacen con fluidez, qué recursos utilizan o si titubean constantemente. Simplificando bastante, suelo clasificarlos en dos grupos: Aquellos que hablan (y escriben) de forma clara y concisa, lanzando ideas sencillas que el interlocutor entiende y asimila con facilidad. Ejemplos hay de #otraformadeliderar y comunicar. Aquellos que hablan de forma difusa y grandilocuente, usando un palabrerío que obliga al interlocutor a hacer un gran esfuerzo de entendimiento. Es fácil encontrar ejemplos en la política, por ejemplo. En realidad existe un tercer grupo, menos frecuente, del que hablaremos en otra ocasión: los tímidos. Es algo que no deja de sorprenderme, que ocupes un puesto de responsabilidad y no sepas comunicar tus ideas con fluidez y de forma sencilla, tanto dentro de la empresa como en público. Evidentemente, no es criticable utilizar una forma u otra, todo depende de quién tengas enfrente. Pero, es importante comunicar sin ambigüedades. Habitualmente, te comunicas con un público medio que debe comprender tu mensaje en pocos segundos. No está de más practicar una comunicación eficaz. Comunicar sin ambigüedades. Todo esto me lo recordó […]

(Leer más...)