Terminar lo que se empieza, como principio

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Terminar lo que se empieza

Hace unas semanas estuve en una charla de Alfonso Alcántara dentro del ciclo “Entrénate para liderar”. Durante la charla, Alfonso contó una anécdota curiosa. Charlando con una responsable de RR.HH., le planteaba cuál era la competencia que más valoraba al contratar a un empleado. Cualquier director con la lección bien aprendida en un MBA respondería “de manual”. Liderazgo, comunicación, planificación o iniciativa. Ella respondió algo más potente: “la capacidad de terminar lo que se empieza”.
 

Buscando excusas para no terminar lo que se empieza

Hemos hablado varias veces por aquí de nuestra obsesión por la productividad. La productividad no implica hacer más cosas, sino aprender a trabajar mejor.

Entre otras cosas, se trata de terminar lo que se empieza. Pero constantemente buscamos excusas para no terminar lo que empezamos. Lo disfrazamos de falta de interés, pero es simplemente falta de constancia. Las personas exitosas se distinguen por terminar cada tarea que empiezan, aunque no les agrade. Successful people finish shit, dicen los americanos.

Personalmente, sólo me funciona centrarme en algo hasta que lo termino. Soy nefasto cambiando de una tarea a otra. Los días que tengo varios temas abiertos parece que no avanzo nada. Así que la mejor opción suele ser centrarme en una tarea hasta acabarla.
 

Retomando proyectos personales

Además de proyectos profesionales, hay decenas de proyectos personales que vamos descartando. Ideas que no salen de un cuaderno o un blog. Ideas que no mueren, porque nunca terminan de nacer. En mi caso, últimamente me planteo retomar el proyecto Personal MBA que dejé aparcado hace… ¡8 años!

Nada aporta más satisfacción que lograr un objetivo. Si además lo consigues siguiendo tus propias normas, la satisfacción es todavía mayor. Restas importancia a los problemas que has solucionado. Pero haber tenido ese compromiso con tus propias reglas suele más satisfactorio que el resultado final.

Esa responsable de Selección tiene razón. Las personas que alcanzan sus objetivos se caracterizan por terminar lo que empiezan. O quizá los alcanzan porque ponen toda su energía en terminar lo que se empieza.
 

Créditos de la fotografía: Udo Kempen en Flickr (bajo licencia Creative Commons)

2 comentarios

  1. […] Un rasgo diferencial de las personas exitosas es que se centran en terminar lo que se empieza, aunque las tareas no resulten agradables.  […]

  2. Margarita says:

    Qué importante principio en la formación de las personas… he conocido individuos muy inteligentes, pero algo ocurre en sus mentes, que no terminan nada de lo que empiezan

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