Desarrollo personal: Planificación y procrastinación

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Planificación

(Atención: “ladrillo personal”, aviso por si no te interesa)

Me voy a desnudar un poco. Ya he comentado que en mi empresa estamos siguiendo un proceso de desarrollo (en casa del herrero…, ya se sabe). Muy apoyado (incluso fomentado) por la Dirección, lo cual se agradece. El proceso lo asumimos en el momento justo porque ahora somos una organización más madura que hace unos años, y además estamos en un momento en que debemos prepararnos para los retos profesionales que debemos afrontar en los próximos años. Antes, consolidación. Ahora, crecimiento sostenido. Y también para el desarrollo de mi propia marca.

Para los que sean ajenos a estos temas de Recursos Humanos, las evaluaciones iniciales las hemos dividido en dos grandes bloques: Competencias personales, a través del modelo de Inteligencia Emocional de Goleman y Boyatzis, realizando un cuestionario de comportamientos. Competencias técnicas, es decir aquellas que requiere mi función actual (y estratégica, claro). El proceso es complejo, pues se trata de una evaluación 360º que abarca desde la autoevaluación hasta la evaluación de tus colaboradores, incluyendo la evaluación de tu jefe (responsable) y la de tus compañeros. Al final, varias evaluaciones y un perfil que debe ser consensuado entre tu responsable y tú mismo para dar lugar a un perfil competencial. Después continuaremos a un proceso de coaching

El tema es que después de completar mi evaluación he/hemos detectado que tengo una deficiencia clara en Planificación y organización, Gestión del tiempo propio (ya hablé de mi procrastinación) y en Desarrollo de otros. Cosa que ya sabía, claro. El resto de competencias las tengo relativamente bien. Y he decidido empezar por prepararme para desarrollar mis gaps en un plazo razonable, y me centraré ne las dos primeras porque hemos valorado que otras deficiencias están muy relacionadas que mi mala gestión del tiempo y mi dispersión en su uso.

Así que he empezado por estudiar qué supone la procrastinación y cómo superarla, y he encontrado algunos buenos artículos. En principio, hay que decir que es un comportamiento psicológico complejo, y que en principio no está relacionado con la gestión del tiempo (sorprendente!). A menudo los procrastinadores sabemos qué debemos hacer, aunque a veces no lo hagamos. Y que nos den calendarios muy detallados tampoco ayuda. Algunos rasgos de personalidad:

  • Excesivamente optimista en sus planificaciones (lo tengo)
  • “Todo está bajo control, ¡ ya empezaré !” (lo tengo)
  • Esta naturaleza “dejada” provoca lo siguiente: “Yo trabajo mejor bajo presión” (lo tengo)
  • Una forma de tratar las presiones externas: “Estoy demasiado ocupado, ahora no puedo” (lo suelo hacer, lo que provoca que no dedique el tiempo necesario al desarrollo de otras personas)
  • Excesivamente perfeccionista (lo tengo): ¿ lo perfecto es enemigo de lo adecuado ?
  • Baja tolerancia a la frustración y terquedad (lo tengo)
  • A veces, impotencia por no terminar el trabajo a tiempo (¿ soy ineficiente ?, debo valorarlo…)

Creo que esto viene de mis tiempos de estudiante. Estudiaba siempre en el último momento y siempre sacaba buenas notas. Estos refuerzos positivos no hacen más que acentuar mi procrastinación.

Algunas razones para desarrollar esta deficiencia: disfrutar de una mayor libertad personal y de una liberación para mi mente, que permanentemente me recuerda los temas pendientes.
Las acciones que realizamos nos hacen ser lo que somos. Ahora tengo que realizar acciones que me lleven a ser lo que quiero ser.

Algunos pasos para mejorar:

  1. Darme cuenta de si retraso algo innecesariamente
  2. Descubrir las verdaderas razones del retraso. Hacer una lista.
  3. Afrontar estas razones y superarlas: ¡ somos fuertes !
  4. Empezar la tarea.

Ya tengo algunas características (creatividad, iniciativa, orientación al cliente, capacidad analítica) por las que soy valorado y que forman parte de mi marca, y debo desarrollar otras (como planificación) que me gustaría que estuvieran en ella. Sin prisa pero sin pausa: el camino es largo, pero depende de mí y de mi claridad de objetivos. Prometo comentar mi evolución.

Créditos de la fotografía: Nomadic Lass en Flickr (bajo licencia Creative Commons)

16 comentarios

  1. Julen Iturbe says:

    Ya se lo pasé a Jaizki en su momento. Aquí en Bilbao tengo un amigo, Txetxu Barandiaran, con un blog estupendo sobre libros, del que siempre he admirado esta disciplina que comentaba en un post.
    http://convalor.blogia.com/2006/022202-infoxicacion.-remedios-caseros.php

    Quizá te sirva.

    • Muchas gracias por la recomendación. He echado un vistazo al post de Txetxu y me parece una pasada. ¡Creo que tampoco debo pasar del todo a la nada en 10 días! :)

      Pero es admirable la autodisciplina que se impone. Sólo me queda la duda si eso te resta algo de eficacia en momentos puntuales y merma algo tu capacidad creativa.

      Lo poco flexible siempre tiene problemas con la imprevisión. De todos modos, lo valoraré para iré poniendo en marcha diferentes acciones encaminadas a mejorar mi gestión del tiempo.

      Gracias de nuevo.

  2. Nice Lazpita says:

    Hola Alfonso. Interesante tu proceso de desarrollo y encomiable el ánimo con el que lo afrontas, lo que garantiza su éxito.

    Dentro de las tareas que te planteabas, yo te recomendaría una. Una vez que hayas detectado que retrasas algo y ves cuales son los motivos, en vez de anularlos y pensar ¡soy fuerte!, te animaría a buscar que función positiva están cumpliendo. Es decir, todo comportamiento que realizamos, no lo hacemos por azar. Busca satisfacer alguna necesidad, aunque no seamos conscientes de ella. Tiene una intención positiva. Lo interesante es satisfacer esa necesidad mediante otro comportamiento que te sea más adecuado. No se trata de desprendernos de comportamientos “inadecuados”, sino de reservarlos para cuando sean adecuados, que oportunidad habrá.
    Perdona el rollo; espero que te sirva y ¡ánimo! seguiremos tu proceso desde la barrera.

  3. F Polo says:

    “Estudiaba siempre en el último momento y siempre sacaba buenas notas”.

    Esa es mi lacra, también.

    • Pues nada, Fernando. Échale un vistazo al artículo de procrastinación y si te apuntas, montamos un Club de Procrastinadores en Desarrollo… :-)

      • Mercurio says:

        Me parece que me uno al club.

        Conforme iba leyendo tu post iba pasándome como cuando de pequeño cambiabas cromos, lo tengo, lo tengo, lo tengo…

        Me leeré los consejos que te han dado, y te comento que yo también he empezado mi proceso. Para ello parto mis tareas en minitareas que voy marcando como realizadas (me encanta eso de tachar una tarea je je) e intento seguir el orden y no andar saltando de unas a otras.

        Uno de los problemas que me encuentro es que mi trabajo se podría definir como el de evitar que los compañeros tengan problemas en su trabajo con lo cual en cualquier momento puede llegar una interrupción (y como no siempre con prisas). Los estoy enseñando a que me manden las tareas por correo electrónico que me permite gestionarme mejor, pero es difícil y no es raro encontrarme la mesa llena de papelitos en cuanto me doy la vuelta.

        Vamos a tener que hacer una asociación tipo alcohólicos anónimos :D

    • Ya había leído el palabro por algún otro sitio, y a aquel post anterior no le hice mucho caso ;)
      Pero ahora me doy cuenta que tengo !todos los síntomas! Tengo en casa como quince o veinte cosas pendientes para hacer, que justo he empezado y me he puesto con otra cosa… maquetas de tren, otras de aviones, rediseño de páginas web, mini-proyectos con los que iba a hacerme rico :D

      En fin, habrá que ponerse las pilas, es bueno ver que parece que tiene solución… :)

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